Cuando uno mira la hora… ya son las seis de la tarde; cuando uno mira hora… ya es viernes; cuando uno mira la hora… ya se termino el mes, cuando uno mira la hora… ya se terminó el año; cuando uno mira la hora… ¡ya tienes 50 o 60 años!
Cuando uno mira la hora … ya no sabemos más por donde andan nuestros amigos.
Cuando uno mira la hora… perdimos al amor de nuestra vida y ahora, es tarde ya para volver atrás.
Si me fuera dado un día más, una oportunidad, ya no miraría más el reloj.
Seguiría siempre de frente e iría jugando por el camino. Disfrutando el presente.
Sostendría a todos mis amigos y compañeros que ya no sé por dónde andan, ni cómo están, y les diría:
“Ustedes son extremadamente importantes para mí.”
Abrazaría fuertemente al amor mío, y le diría: “Te Amo…!”
No dejes de hacer algo que te gusta por falta de tiempo.
No dejes de tener alguien a tu lado, porque tus hijos pronto no serán tuyos, y tendrás que hacer algo con ése tiempo que resta, en donde lo único que vamos a extrañar será el espacio que sólo se puede disfrutar con la familia y los amigos de siempre.
Ese tiempo que, lamentablemente, no vuelve jamás…
