Entramos en una semana de transición silenciosa y revelación interior. La energía se mueve entre el final de un proceso y el inicio de otro que aún no se muestra del todo.
Es un tiempo de depuración emocional, de limpiar lo sutil y dejar que lo esencial emerja.
El alma busca orden y claridad, pero desde un lugar más profundo, donde la mente ya no puede controlar el proceso.
Podrías notar momentos de confusión, cansancio o necesidad de soledad. No es retroceso: es integración. La energía está reorganizando tu campo interior para prepararte a un nuevo nivel de conciencia.
Esta semana favorece la escucha y la rendición consciente: aceptar lo que es, sin forzar que nada suceda antes de tiempo. Las respuestas llegarán, pero lo harán en el silencio y no en el ruido.
En el hemisferio norte
La vibración se siente más introspectiva y densa, como si el cuerpo y el alma pidieran un descanso profundo.
Es momento de bajar el ritmo, honrar lo vivido durante el año y atender lo que necesita cierre.
Los días más cortos y la luz más tenue acompañan este proceso de recogimiento.
Pequeños rituales —encender una vela, escribir lo que deseas soltar o limpiar el espacio donde habitas— pueden ayudarte a liberar viejas energías y recuperar equilibrio.
La clave está en rendirte sin resistencia, porque lo que parece detenerse, en realidad se está gestando desde adentro.
Este es un momento ideal para liberar emociones acumuladas a través de las cartas simbólicas, una herramienta que he explicado en varias ocasiones y que siempre recomiendo en las sesiones.
Es un método sencillo pero profundo, que permite expresar y transformar lo que el alma ya está lista para soltar.
En el hemisferio sur
La energía se vuelve más viva y expansiva.
Es un tiempo fértil, donde las ideas que nacieron en meses anteriores comienzan a manifestarse.
El movimiento interno pide acción, pero desde la conciencia, no desde la prisa.
Escucha el impulso creativo y sigue lo que te inspire, aunque no veas todavía el resultado final.
Confiar en el proceso es fundamental: el universo se mueve contigo cuando actúas desde la autenticidad.
Deja que tu energía fluya y nutra lo que verdaderamente deseas ver florecer.
Energía colectiva
A nivel global, se siente un reajuste vibracional profundo.
Las estructuras personales y colectivas se mueven para alinearse con una nueva frecuencia de verdad.
Puede haber cierta inestabilidad emocional o sensación de vacío, pero debajo de todo eso hay un orden mayor gestándose.
Estamos aprendiendo a vivir desde un punto más consciente, más alineado con la voz interior que susurra: “Ya no eres quien fuiste, pero todavía estás recordando quién eres.”
Enfoque sugerido
Respira profundamente tres veces al despertar y repite: “Me permito estar en paz con lo que es.”
Realiza un acto simbólico de limpieza (ordenar, quemar papelitos, bañarte con sal o hierbas).
Dedica un momento de silencio antes de dormir para escuchar tu cuerpo y tus sueños.
Si surgen emociones intensas, obsérvalas sin juicio. Son parte del proceso de purificación.
Nota
Este mensaje fue canalizado en la madrugada del 2 de noviembre, tras un 1 de noviembre —Día de Todos los Santos—, momento en que la presencia de los diferentes planos se hace más tangible y el alma humana recibe un suave toque de atención.
En estas fechas, las fronteras entre lo visible y lo invisible se vuelven más sutiles, recordándonos la importancia de nuestros valores, nuestras raíces y el hilo que nos une con quienes nos precedieron.
Este mensaje ha sido recibido desde la conexión interior con planos de conciencia sutiles.
Tómalo solo si resuena contigo.
No se trata de creerlo, sino de sentirlo y contrastarlo con tu propia experiencia.
Cada uno recibe la información que está preparado para integrar en su proceso y en su momento perfecto.
💫 Permite que la vida se reorganice a través de ti. Lo que parece pausa es, en realidad, el preludio de una nueva expansión.
